Paga extra de
diciembre de 2012
Más allá de las decisiones judiciales, más allá de lo
que finalmente considere el Tribunal Constitucional sobre nuestro derecho a la
paga extraordinaria de diciembre 2012, bien completa o bien en el porcentaje
que pudiese corresponder en función de la fecha en la que fue de aplicación el
Real Decreto-Ley 20/2012, más allá de todo ello, lo cierto es que nos acercamos
al año 2015 y por lo tanto entramos dentro del umbral en donde el Gobierno y el
partido que sustenta habían comprometido la devolución, eso sí, condicionado al
momento en el que se iniciase la recuperación económica.
Las meses que llevamos de este año, este gobierno no
deja de inflarnos la cabeza con noticias en positivo, con noticias que hablan
de la luz al final del túnel, con noticias que hablan de reducción del
desempleo de recuperación económica. Cabría esperar por tanto, que con dicha
valoración se estuviese en condiciones de discutir cuál será la fórmula a
utilizar el próximo año para propiciar la devolución de la paga extraordinaria
que nos birlaron en el 2012.
Pues parece que no.
Este gobierno parece que se entristece cada vez que le
toca hablar de las retribuciones de quienes trabajamos en la función pública.
Así se ha puesto de manifiesto en el Congreso de los
Diputados. En la última sesión de control al Gobierno, el ministro Montoro no
fue capaz de ponerle fecha a la devolución y quedó de manifiesto que este
Gobierno no tiene entre sus prioridades dicha devolución y que para nada se
plantea el año 2015 como fecha que pueda permitir el inicio de la devolución a
pesar de las reiteradas referencias a la mejora económica general.
No desmentía el ministro al Secretario de Estado de
Administración Pública, Sr. Beteta, que con anterioridad había evitado también
ponerle fecha a la devolución de dicha paga y, en cualquier caso, derivaba
cualquier actuación al año 2016 o posteriores.
El Gobierno del PP sigue en sus trece de mantener un
esquema insoportable de empobrecimiento de las empleadas y empleados públicos y
no está dispuesto a renunciar a este resorte para cuadrar las puñeteras y
mentirosas cuentas que nos presentan cada año a través de los presupuestos.
Es necesario cambiar estos equilibrios, es
imprescindible mover pieza para impedir que este gobierno pueda seguir
machacando a quienes trabajamos en la Administración Pública con semejante
tranquilidad.
Un saludo.
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